sábado, 25 de noviembre de 2006

La actualidad de la plaza Bruckman

Una incógnita de color verde esperanza


Sin Dudas la ciudad de Buenos Aires es una dimensión en la que cada uno de sus habitantes vive en su mundo, bajo sus reglas y sobre todo a mucha velocidad. En este planeta, también existen los espacios verdes que funcionan como una especie de decoración de la metrópoli y son sede de encuentros, amor y diversión.

El repaso por las tantas plazas porteñas, llega a la zona de San Cristóbal, precisamente en la esquina de jujuy y México donde se ubica la Plaza Bruckman. justamente su nombre deriva de la lucha de los obreros de la fábrica Bruckman, hoy nuevamente en manos de los trabajadores.


Cada fín de semana en este lugar se desarrollan las actividades de La Oruga, dedicada a recuperar el espacio público. Entre sus temáticas, se destacana: los coros, una biblioteca popular, juegos didácticos para los niños y pequeñas obras de teatro.

El terreno ostenta la mitad de la manzana entre las mencionadas calles, sumandose a las mimas la avenida Independencia y Saavedra. En él, un colegio municipal sueña con que sus alumnos puedan salir al recreo y jugar en el césped. se divisan bancos, mesas, hamacas, toboganes y sobre las paredes murales artisticos.

A lo lejos puede divisarse una pareja de ancianos disputandose una reñida partida de ajedrez, se escucha una radio que emite un partido de fútbol y varios chicos haciendo de ese deporte una realidad.
Sin embargo, pese a los lindos momentos, la plaza sufre también de la inseguridad que se vive en el país y esto provocó que quede cercada. El parque se fue convirtiendo en sede de aquellos que se unén por el alcohol, la droga y las peleas;un paisaje que se va convirtiendo en desolador a medida que la noche avanza.

A primeras horas de la mañana sólo se observa un enorme basural que no permite disfrutar de este espacio verde; el lugar ya no es el mismo.

Otras plazas sufren la misma situación que Bruckman por lo cual deben ser enrejadas, entre los casos más conocidos se encuentran; el Parque Centenario, Parque Rivadavia y el espacio de Dorrego y Corrientes.

Entendemos que cada zona donde haya juegos y sea motivo de diversión para los más pequeños y de recordar viejas épocas. es un viaje a la felicidad y un patrimonio cultural de la ciudad que seguirá sobreviviendo a lo largo de los años.


Quedará de rever la posibilidad de que la plaza recupere su libertad, tomar mayores medidas de seguridad y que cada espacio verde vuelva a pertenecer a las personas del barrio. El sueño, justamente del grupo La Oruga y el de todos también.










viernes, 24 de noviembre de 2006

El Barrio en la escuela

Entrevista a Andrea Bulsoni y Leandro Iacomini

Cursaban la carrera de Educación Popular en la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo. Querían llevar a la práctica la teoría. Hasta que los vecinos de la Asamblea del barrio de Balvanera les comentaron que tenían un proyecto con la escuela Laprida, ubicada en México y Matheu. Desde el comienzo el objetivo de ambos era que la gente retome el espacio público y tenga la posibilidad de opinar y debatir libremente.

G.M -¿Cómo surgió la idea de crear este movimiento?

A.B -Todo nació en una asamblea del barrio que se llamaba “asamblea del almacén” partió de un proyecto en una escuela y desde el primer momento nuestro objetivo era articular el proceso asambleario con la escuela, transmitir esa idea a los chicos.



Empezamos yendo a la escuela y a mitad de año nos dimos cuenta que ninguno era de la asamblea del almacén si no que éramos casi todos de afuera pero dependíamos mucho de ella para las decisiones, entonces nos conformamos de manera independiente, y así nació “La Oruga”, empezó desde ese proyecto, pero a la vez había compañeros que no podían participar en la escuela los días de semana por razones laborales, entonces empezaron a trasladar las actividades los sábados en la plaza.

S.L - ¿Por qué el nombre de “La Oruga”?

L.I - Viene de un juego que hicimos en el colegio y hacemos acá en la plaza también, la versión mas cursi dice que se convierte en mariposa. Andando en Oruga, consiste en caminar todos juntos adentro de una tela circular, esto lo hacemos en cada movilización, como una manera creativa de expresarnos y bajo el lema “Seguimos caminando”.Así marchamos todos los 24 de marzo recordando el último golpe militar.
Finalmente, para nosotros la Recreación Popular, significa que todos podemos aprender jugando. Por eso pensamos que es importante recuperar el espacio del juego como forma de expresión y conocimiento.

S.L - ¿Todo esto aparece con la crisis del 2001 con las asambleas?

L.I - La “asamblea del almacén” venia trabajando algún tiempo antes, nosotros socialmente no nos sumamos por la crisis sino por el proyecto de la escuela.

G.M.- ¿Por qué creen que hay que recuperar el espacio público?

A.B - La idea tiene que ver con que nosotros venimos trabajando en un espacio público y ese es nuestro lugar de encuentro. Pensamos que la escuela debe ser pública al igual que la plaza y la idea es recuperar el espacio que es de todos, y vemos que de a poco se esta perdiendo.

G.M - ¿Cuáles son las principales actividades que realizan?

L.I - Hay actividades que varían según la temática que se realice el día de encuentro, pero siempre contamos con un taller de lectura, que a veces es libre, un taller de escritura que realizamos cada 15 días donde se ejercita la capacidad creativa, hay también un taller para chicos mas chiquitos donde se pinta, otro para chicos de 8 a 13 de recreación en general, una biblioteca popular, y taller de pintura.

S.L - ¿Cómo se financia este proyecto?

A.B - Todo lo que se hace en La Oruga es a pulmón y de vez en cuando organizamos alguna rifa, o peñas para recaudar fondos.


G.M - ¿Cómo se dividen los roles dentro de las actividades?

A.B - Somos entre diez y quince personas y nos dividimos por talleres. Por lo general cada uno se dedica al taller que más le gusta y tiene a cargo 2 o 3 personas. También hay estudiantes, maestros, trabajadores sociales y vecinos que colaboran con nosotros.

S.L - ¿Responden a algún partido político?

L.I - No, no pertenecemos a ningún partido político, somos independientes y autónomos, somos solo personas que se unen por una causa en común y todos aquellos que quieran trabajar con nosotros pueden hacerlo, ayudando en la coordinación de las actividades y aportando nuevas ideas.

jueves, 23 de noviembre de 2006

Asociación Civil Carla Arduini:






Norma Bonelli, es la presidenta de la Asociación Civil Carla Arduini. La entidad lleva el nombre de su hija, que en diciembre de 2004 murió atropellada en pleno centro de Lanús Oeste. Así es como busca “transformar el amor por Carla en un intento solidario de buscar más seguridad vial y ayudar a los vecinos”.
El caso llegó a los medios cuando una carta de lectores enviada al diario Clarín por Bonelli y su esposo, Héctor Arduini, fue publicada: "El día 22 de diciembre de 2004 en la estación Lanús, a las 16, nuestra hija Carla Florencia Arduini, de 15 años, fue atropellada por un camión que pasó sin frenos, a alta velocidad y por la mano izquierda de la Av. Hipólito Yrigoyen o Pavón, como es conocida. No le bastó con atropellarla, romperle el hombro, la clavícula y empujarla 20 metros. Tampoco se detuvo, y la pasó por encima en su intento de fuga, rompiéndole las dos caderas, pelvis y fémur. No fue la Policía la que detuvo al camión, sino la gente que indignada comenzó a gritarle al camionero, finalizando su embestida en la esquina siguiente, y de contramano. Carla no pudo sobrevivir. Estuvo 96 horas internada. Ni las leyes de tránsito, ni penales, tienen pena de prisión para los que violando todas las normas de tránsito asesinan a inocentes. Las complicidades y la falta de controles todo el tiempo y en todos lados de nuestro país, se lleva vidas inocentes".
La mamá de Carla tiene claro que con la Asociación, de a poco, pueden lograr que los vecinos se involucren y así conseguir cambios positivos que mejoren la seguridad para peatones y automovilistas. Y sostiene que “con proyectos propios y de la gente, queremos ordenar el caos de tránsito en Lanús, mejorar la educación vial y que no se produzcan muertes evitables, como fue la de mi hija".
Según las cifras que maneja la entidad, hay sólo en el lado Oeste de la ciudad unos 12 accidentes por día. "Intentaremos bajar esa estadística involucrando al vecino", refiere Bonelli, quien resalta que buscan cambios en las leyes de tránsito, como que por ejemplo cruzar un semáforo en rojo merezca más que una multa. Y explica que en Chile, al conductor le retiran el registro en esos casos. Además, en la asociación hay abogados que evaluarán problemas derivados de accidentes de tránsito.El próximo paso ya está en marcha: "Pensamos hacer una presentación, avalada por firmas, ante el Concejo Deliberante pidiendo que corran el semáforo de Yrigoyen y 25 de Mayo unos 20 metros y que coloquen rejas en las veredas, como las que hay en Corrientes y Callao. Ese cruce es muy peligroso para todos", dijo Bonelli y asegura tener unas 10.000 firmas de vecinos.

La oruga, colectivo autónomo de recreación popular



Para el pueblo lo que es del pueblo

La oruga, comenzó a funcionar en al año 2001 como una asamblea popular bajo el nombre “asamblea del almacén” en el barrio de Balvanera y las actividades se llevaban a cabo en la escuela número 15 de Capital Federal. La idea principal de esta organización era poder trabajar con los chicos de sexto grado y articular el proceso asambleario con la escuela.

El trabajo en el colegio se extendió hasta el 9 de diciembre de 2004. En junio de 2005 la agrupación se traslada a la plaza ubicada en México y Jujuy, a tres cuadras de la escuela. A fines de 2005 aquellos que participaban de las actividades, decidieron retirarse por una serie de diferencias y se constituyó el Colectivo Autónomo de Educación y Recreación Popular “La Oruga”.

La meta de esta agrupación es recuperar los espacios públicos que con el correr de los años se fueron perdiendo,aquellos lugares de lucha, memoria y resistencia, que le pertenece a todos, para jugar, compartir, aprender y enseñar.

Es un grupo independiente y apartidario.Trabajan con chicos y adultos para construir en conjunto una visión crítica de la realidad social actual y para recuperar el papel del juego como forma de expresión y conocimiento.

La educación cumple un papel fundamental en La Oruga, ya que es una de las herramientas básicas para terminar con la exclusión y la opresión, propias del sistema capitalista.

Todas las reuniones que se realizan en la plaza son de carácter abierto donde se plantean temas que incumben a toda la sociedad, se debate para llegar a un consenso y se toman decisiones en conjunto. Las reuniones siempre se hacen dentro del barrio, ya sea en la plaza, en un bar o en una escuela.

La idea es que en estas reuniones participen todos los integrantes del colectivo pero, considerando que para muchos esto se vuelve imposible, por lo menos tiene que concurrir un integrante de cada grupo de trabajo.

Estas personas serán las encargadas de comunicarle al grupo las discusiones de las reuniones generales. El objetivo de cada encuentro es reflexionar y decidir acerca del accionar de La Oruga como proyecto político-educativo, trascendiendo la particularidad de las actividades que lleva a cabo cada uno de los grupos.

En este ámbito, toman decisiones acerca de objetivos generales y formas de llevarlos a la práctica. También son considerados los asuntos que implican a La Oruga como colectivo, como por ejemplo, las relaciones institucionales (con otras organizaciones o movimientos).

Éste es el lugar de las discusiones y los debates políticos más importantes. Por otra parte, representa la posibilidad de conocer lo que otras agrupaciones están realizando, enriqueciendo así el trabajo de todos e intentando solucionar los inconvenientes comunes en conjunto.
Otro de los aspectos relevantes, es que se evalúa la necesidad de abrir nuevos espacios de trabajo o de abandonar otros ya existentes. En efecto, todo nuevo espacio de trabajo debe pasar por una reunión general para debatir los objetivos y los métodos que se propone, de modo tal de que sean compatibles con los objetivos generales de La Oruga.

En caso de que surja algún conflicto dentro de la organización o entre grupos de trabajo, los mismos deben ser resueltos en el seno de las reuniones generales que se realizan cada quince días.

Antes de cada actividad se reúnen por grupos para planificar con anticipación que es lo que se va a hacer y como se repartirán los roles; la dinámica de las reuniones puede variar, pero en general, el primer paso es plantear los objetivos particulares para luego seleccionar las dinámicas de recreación y educación popular que mejor los expresen, sin dejar de tener en cuenta las características e intereses particulares del grupo para el cual se trabaja.

Al inicio de cada encuentro se hace una reflexión sobre la actividad anterior, estableciendo que objetivos fueron logrados y cuales serían los cambios convenientes en cada caso para poder llegar al mismo.

El rol de los coordinadores debe ser el de facilitar técnicas y dinámicas para llevar a cabo el proceso educativo, procurar el conocimiento mutuo entre los participantes y proponer temas o cuestiones en debate para así generar en los educadores y en los chicos un rol activo y crítico.

Trabajan teniendo en cuenta las necesidades, los intereses y las situaciones reales de las personas que intervienen en el proceso educativo sin dejar de lado los contenidos sociales.

En lo que refiere a las actividades, cuentan con seis grupos de actividades fijas en la plaza de México y Jujuy que se encargan de la coordinación de las mismas , entre los que se pueden mencionar, los talleres de pintura, plástica y la biblioteca popular

La agrupación también participa en marchas y movilizaciones haciéndolo de una manera creativa. Para esto llevan tres Orugas y consiste en una franja de tela de cincuenta centímetros de ancho y varios metros de largo, cocida en los extremos, de manera que formen un circulo. Las personas pisan la tela ingresando dentro del mismo, de esta manera cuando todos caminan, la oruga va girando y avanza. La más grande lleva el lema de “ Seguimos caminando” el cual se observa a medida que va girando, esta actividad se repite en cada movilización.

Esta agrupación hace hincapié en la Argentina, recuerdan en cada encuentro las movilizaciones de los piqueteros, la lucha que enfrentan las Madres de Plaza de Mayo, los grupos que trabajan en las villas, los sindicatos combativos, las fábricas recuperadas, etc. Y así como el interes de los chicos es jugar, el de ellos es vinculas ese juego a las luchas y a los luchadores que encarnan esos valores, a pesar de que desde los medios se los criminalice.

Finalmente privilegian las luchas que se enmarquen en el contexto del barrio para trabajar con la realidad concreta de los chicos. El barrio de Balvanera, tenía en el 2004 un recuerdo caliente que eran las obreros de la fábrica recuperada Brúkman. Obreros que habían sido desalojadas con represiones múltiples y por lo cual tuvieron que acampar en la plaza .

Y así, esto que llamamos Recreación Popular, y que cada organización habrá llamado de diferentes formas, fue el resultado de la práctica y de esta mezcla entre la recreación y la educación.





Eva Hajduk

Originariamente las tierras contiguas a la estación estaban cubiertas de pajonales. Eva Hajduk comenzó parquizando el área; en 1958 gracias a las inquietudes de un grupo de damas, entre ellas Eva, se iniciaron las gestiones necesarias, para convertir estos terrenos en un magnífico jardín. Este objetivo se logro gracias a la autorización de Ferrocarriles Argentinos y el apoyo del Director de Parques y Paseos de la provincia de Buenos Aires, Oscar Chiesa, quien colaboró con el envío de los primeros árboles que se plantaron en el parque. Así, hoy el Rosedal lleva su nombre. El Parque Eva Hajduk está conformado por numerosos paseos que llevan el nombre de destacadas personas de la zona.










  • Paseo Beatriz: en honor a la hija mayor de Eva, que recuerda su prematura desaparición, víctima de un accidente automovilístico. Este paseo se complementa con un armonioso conjunto móvil de aros metálicos concéntricos.





  • Paseo Longhi: en honor a Antonio Longhi, quien contribuyó con donaciones al progresos de las instituciones de Bien Público, como la Sala de Primeros Auxilios y otras entidades.





  • Paseo Antonio Campitelli: en honor a un jefe de la estación y fiel colaborador de la Asociación Amigos de Estación de Ranelagh.





  • Paseo Priscilia: en homenaje a una alumna del colegio Nuestra Señora que sufriera un accidente trágico. A pedido de sus padres se le asignó un pequeño sector en el parque, siendo un abeto el símbolo de su recuerdo siempre presente.





  • Paseo Thomas: en honor a César Enrique Thomas, quien fue un activo colaborador de la Sala de Primeros Auxilios y otras entidades vecinales.





  • Rincón Anita Martín: Dedicado a la persona que trabajó conjuntamente con Eva Hajduk en la creación del Parque.





En 1970 se creo la Asociación Amigos de la Estación Ranelagh, una sociedad civil legal, que concretó definitivamente la conversión de este jardín en parque y paseo público. Llevando actualmente el nombre de quien fuera su mentora.

Entrevista a Miguel Bornaschella (Presidente de la Asociación “Amigos de la seguridad de Ranelagh”)

Miguel Bornaschella: En Ranelagh hace cuatro años atrás nosotros teníamos 160 hechos delictivos por mes, no sabíamos que hacer porque el problema político económico en la argentina lo tiene todo el mundo, pero que quisimos hacer, nos acercamos al comisario de la dependencia y le dijimos señor ¿Qué problema tiene? ¿en que podemos colaborar nosotros los vecinos? Y el por entonces comisario Pedro Sciocci, nos atendió y nos dijo “miren señores, el único móvil que tengo en este momento es ese Renault 12 que está ahí afuera” y era lo único que tenía. Entonces nosotros dijimos ¿en que podemos colaborar nosotros? En forma sana y sin ningún tipo de problemas; entonces reparamos 4 o 5 móviles y los pusimos totalmente en condiciones, les rectificamos el motor, le hicimos alineación, balanceo, tren delantero, chapa, pintura, motor… le hicimos todo, todo eso sin cargo, un grupo de amigos, parte de la asociación “Amigos del Parque de la Estación”, del “Ranelagh Club”, una unión vecinal que tenía Ranelagh y todos nos pusimos para hacer eso; bajamos la delincuencia de 160 casos a 30 o 35 mensuales, entonces vos fijate lo que significa un lugar donde hay 150, 160 hechos delictivos mensuales y que se reduzca a 30, y eso desde el uno por día.

En el uno por día está el robo de la gallina, la bicicleta, el secuestro, violación, todo. Pusimos en el parque de la estación dos “bici policías” compramos las bicicletas y la ropa para esa gente, pusimos todo y ese fue el aporte que hemos hecho en estos cuatro años donde en Ranelagh hoy se vive tranquilo, y la Policía de la Provincia de Buenos Aires nos dio una camioneta nueva ya que al ver el trabajo que habíamos hecho colaboraron y hoy tenemos tres o cuatro camionetas nuevas sin dudas, pero el movimiento que tiene diario es a destiempo con lo que el estado provee, por ejemplo, se rompe una camioneta ahora a las cuatro de la tarde, hasta que proveen el repuesto y todo de eso recién pasa una semana y nosotros lo que hacemos es en este momento decir, ponele el Comisario nos dice se rompió la rótula del tren delantero… ¡se lo reparamos en el acto!

Lo que ayuda a todo esto es la celeridad con la que se hacen las cosas, te voy a dar un ejemplo, si una camioneta rompe una batería ahora el comisario la tiene que ir a comprar a la batería y no tiene los fondos. Nosotros de ponemos la batería y en media hora la camioneta ya está de nuevo en servicio, entonces eso no sabes si evitó una muerte, un robo o un montón de cosas.

La Escuela Privada de Ranelagh colabora, la Escuela Quinquela Martín colabora, o sea somos un grupo de gente que hemos transmitido, la gente nos cree y entonces tenemos esa reserva.

Acá viene una empresa, viene un colegio, vienen del parque de la estación, del Ranelagh club, del Club de Golf, y amigos de a estación de Ranelagh, viene todo el mundo… eso es lo que hemos hecho. Ahora hicimos una cena que fue para el parque de la estación de Ranelgh que la hicimos en el Golf Club el día 27, la semana pasada, y esos fondos los vamos a destinar también para solucionar los problemas de la seguridad. Hicimos una oficina en el Ranelagh Club donde funcionan las tres instituciones, la de los amigos de la seguridad, del parque de la estación y el Ranelagh Club. Cualquier vecino puede ir ahí y emitir su idea, su queja, lo que pueda, su colaboración de la forma que quiere para acercarse a nosotros.

Nosotros nos reunimos; Lunes por medio se reúne la seguridad; el parque de la estación se reúne todos los Martes y el Ranelagh clubes reúne Jueves por medio. Yo estoy de Presidente en la seguridad, Vicepresidente en el Ranelagh Club y Vicepresidente en el Parque de la Estación, así que te imaginas que hemos hecho una junta entre todos, una unión entre todos para ver por la sociedad.

Gustavo Gallardo: ¿Por parte de la intendencia, reciben algún tipo de ayuda?

MB: La intendencia no puede colaborar por la seguridad ya que la seguridad es de un ente pura y exclusivamente provincial. El Intendente que es una flor de persona nos ayuda en el parque, nos ayuda en un montón de cosas, pero no puede bajo ningún punto de vista colaborar con la Policía por que es un ente que no tiene nada que ver con eso.

GG: ¿Estas tres organizaciones de las cuales usted participa desde que año están trabajando?

MB: Y, hay una que tiene 30 años, la asociación Amigos del Parque de la Estación tiene 36 años, la asociación Amigos de la Seguridad tiene 5 años, pero antes hace muchos años había una cooperadote policial en la que también participábamos y el Ranelagh Club que tiene unos 50 años. Hay también un portal de Internet, pero el problema más grave que tenemos, el problema más grave que tiene la sociedad argentina hoy es la no participación, la gente no participa, la gente sabe que tenemos el problema pero en una reunión vos citas a 400 y vendrán 8, 10, 12 o 20 en el mejor de los casos. Ahora si los citas para linchar a alguien por ahí se junta el doble, pero me parece que no es la forma. Somos totalmente apolíticos y queremos que la gente participe constructivamente.

GG: ¿Cuántas personas participan hoy activamente de estas organizaciones?

MB: Activamente somos, juntando las tres, somos entre 30 y 40 personas. Nos reunimos en distintos grupos y luego cada uno de nosotros, que tiene una distinta tarea asignada, participa a otras personas, o sea busca colaboración en sus allegados para lograr el objetivo. Hace poco juntamos 9 mil pesos para el parque de la estación, para mejorar el parque. Ahora queremos reciclar todo el galpón, arreglar las paradas, etc… tenemos muchas quejas, pero estamos abiertos a sugerencias. Hay gente que viene a quejarse, pero se queda en el dicho; si aguanta viniendo dos reuniones seguidas recién ahí empezamos a prestarle atención. A la gente le hablamos en serio.

GG: ¿El vecino típico de Ranelgh accede fácilmente a participar?

MB: Hay de todo, el vecino de Ranelgh es un personaje, que por ahí te dice que él trabajó con Eva Hajduk haciendo el parque o sea, si realmente todos los vecinos que dicen haber trabajado con Eva la ayudaron realmente, yo creo que ella no hizo nada porque cada vecino que vos ves en Ranelagh estuvo con la pala al lado de Eva Hajduk y es mentira, entonces o Eva Hajduk no los vio o nosotros no los vimos, pero para mí es un poco “jarabe de pico” y después lo que tiene la gente de Ranelagh es que por nosotros mandamos el cobrador para la colaboración, la cortina se mueve pero el portero suena y no sale nadie a pagar. La gente no quiere participar, la gente quiere exigir. Mucha gente dice nosotros pagamos impuestos, y yo les digo que no alcanza, con pagar impuestos hoy en un país como la Argentina no alcanza. Hay mucho más para hacer que pagar un impuesto, y después hay que ver si lo pagamos realmente el impuesto.

Yo vine a este país hace como 50 años, yo soy italiano, vine a los 7 años acá pero lo adopté a este país y este país me adoptó; por eso yo no quiero vivir gratis acá, yo no quiero que ninguno de ustedes me diga ¡¿Tano de … que andás haciendo acá usufructuando mi país?! No no, yo quiero hacer más y cualquiera que me conoce acá de la zona sabe que hago más que cualquier argentino pero sin duda, lejos, e invito a toda mi familia y mis amigos para que participen, no hay otra forma. Es la única forma que tiene este país de salir adelante. Vos a la noche andá, si sos peronista, radical, judío, turco, hacé lo que quieras pero tenés que ir y participaren tu forma, en lo que sea, vos tenés que ir, si sos comunista no importa, vos andá y participás.

GG: ¿Ustedes ofrecen al vecino asociarse y colaborar mediante el pago de una cuota?

MB: Nosotros lo que le decimos al vecino es que venga y participe con lo que pueda, si no puede poner nada que venga y que nos ayude, a organizar cosas, en la comunicación con la gente, que nos ayude. El que puede colaborar lo puede hacer cada 6 meses, una vez por año, una vez por mes, puede colaborar como se le da la gana. Tenemos un cobrador, un tesorero en cada asociación. La contribución es a voluntad, no hace falta que sea económica. Hay muchas cosas que nos e pueden hacer con otra cosa que no sea con dinero y es por eso que el empresario es primordial en algunos caso, puesto que colabora con dinero debido a su falta de tiempo para realizarlo de otro modo.

GG: ¿La raíz de la organización de este grupo, surge de Miguel Bornaschella o de un grupo de amigos?

MB: En realidad surge de mí, surge en una conversación con mi hija. Estábamos muy atemorizados en Ranelagh y había una reunión cuando le dije a ella que yo no tenía ganas de ir, ni de participar más en cosas así, y mi hija más grande me dice “Papá andá, vos sabes lo que hay que hacer, tenés que ir” y la verdad que no tenía ganas pero no me hubiese perdonado nunca que me traigan a mi hija muerta una noche y por no haber participado por dejar de lado algunas satisfacciones personales. Respeto por eso lo que hace también el señor Blumberg y mucha gente, lo único que me diferencia, con el mayor de los respetos que me merecen todos, es que yo empecé a participar antes de que me ocurran las cosas.

GG: ¿Sufrió algún hecho delictivo?

MB: Si, esta cicatriz que tengo en la cabeza fue por un robo, tengo de todo, robos tengo un montón. Palizas, robos, de todo. Yo tengo una empresa de neumáticos y estoy acá hace 25 años y antes éramos transportistas. A mi me da mucha pena porque este es un país maravilloso, y si en Ranelagh de 160 hechos, lo bajamos a 30 con la participación de un grupo de empresarios y vecinos, vos fijate que todo se puede soluciona. No somos ni magos, ni somos del FBI, ni somos de SWAT, solo somos una cantidad de vecinos que tenemos ganas de hacer y fijate que poco hace falta si cada vecino y cada grupo somos así creo que a los ladrones lo agarramos a patadas, no haría falta ni meterlos presos. Para mi lo único que nos salva acá es la participación, no hay otra.

GG: ¿Este modo de colaboración está prohibido?

MB: Sí, está prohibido, las cooperadoras policiales desaparecieron hace mucho cuando vino la democracia, con la cual estoy de acuerdo pero creo que se tiene que solidificar, sino no e suna democracia.

GG: ¿Por realizar estas actividades sufrieron algún tipo de represalia o queja?

MB: No, incluso el Doctor Juan José Mussi se mostró de acuerdo puesto que le encanta la gente que participa. Realizamos obras en conjunto tales como un asfalto en la calle 32. Es una colaboración mutua.

GG: ¿No hay ninguna finalidad política?

MB: No, es totalmente apolítico. Estamos con cualquier comisario de turno, al que esté la damos una mano.

Contamos también con el apoyo de Roberto De Vicenzo, quien está a las órdenes de cualquiera y es un vecino común de Ranelagh. El se saca una foto con cualquiera y ayuda. Es un buen tipo.

GG: ¿Cuál sería para usted una última reflexión o palabra para el vecino que quiere colaborar?

MB: Lo único que le pido a la gente es que participe, que confíe y si o confía que se meta dentro de la institución de la cual él desconfía. No hay otra cosa. Hay que participar desde adentro para ver las cosas. Si quiere a su país que participe y no espere que las cosas las haga otro.

Una cálida estación todo el año

La plaza de Ranelagh es mucho más que un parque que rodea a la estación del ferrocarril, es el punto de reunión de jóvenes de esta localidad luego de horarios escolares, zona de fiestas en días patrios, escenario de encuentros corales y, como algunos de los vecinos del lugar comentan, eterno almacén de recuerdos que se pueden visitar.

Rodeada por una amplia variedad de edificaciones, aquellas que dan carácter de zona residencial, se expresa la naturaleza en su amplia variedad de flores y plantas que son cuidadas y vigiladas puntillosamente por los habitantes de la misma localidad.

Fue en a principios de los años `90 cuando dejaron de transitar por esta localidad perteneciente a la ciudad de Berazategui, los de la ex línea Roca, y de allí en más, como si esto fuera una ventaja, fue aumentando el número de diversas especies florales las cuales transformaron a la plaza en la estación de ferrocarriles más bonita según encuestas realizadas por personal de Trenes Metropolitanos.

Colegios, residencias para ancianos, entidades benéficas y centros culturales encuentran en Ranelagh y su estación un lugar que según ellos recrea la vista, despeja la mente, reaviva recuerdos y hace un espacio a la nostalgia para quienes entre lágrimas y risas recuerdan los comienzos de la estación, completamente desierta de flora, que solo constaba de una pequeña cabaña y una garita para el guardabarreras.

En el año `96, como dice Javier Bargas, actual propietario del puesto de diarios de la plaza y heredero del mismo por más de dos generaciones, “volvió a andar el carrito por la placita de Ranelagh” y de este modo comenzaron a surgir en sus alrededores locales y puestos comerciales, junto con la infaltable feria de frutas y verduras de los días jueves.

Entre alguna que otra sana rivalidad que se pueda encontrar cerca de esta apacible localidad, se puede contar la que existe entre el colegio Padre Márquez y el instituto Nuestra Señora de Ranelagh, los cuales en días festivos y más allá del deporte en cuestión, compiten para darle un motivo más a los festejos de la muy querida y cuidada estación. Pero estos cuidados están además perfectamente organizados por un grupo autodenominado “Asociación Amigos de la Estación de Ranelagh”, quienes al menos una vez por mes se dedican a la manutención de todo el parque y sus alrededores, todo esto sin ayuda de la municipalidad.

Otra de las grandes atracciones que posee Ranelagh es su Club de Golf, que pertenece al célebre golfista argentino Roberto De Vicenzo, quien vive además en la localidad junto a gran parte de su familia.

Es por esto que es mucho más que una simple estación de trenes y a la vez mucho más que una simple plaza, es para vecinos, visitantes trabajadores del lugar un fiel reflejo de un modo y de vida, quizás alejado de la bulliciosa ciudad.